lunes, enero 22, 2007

ASTILLERO

Julio Hernández López

Lindos gatitos

Gobierno extraditado

Ha-La-mer y Re-diez

IFE: libros rosados


Como garboso preparativo para su próxima gira por Europa, el fiscal general de la nación se organizó un paquete propagandístico al enviar a Estados Unidos a notables gerentes ejecutivos de empresas exportadoras nacionales para que tomen largas vacaciones en alojamientos gringos donde podrán inclusive ejercitar sus dotes de canto, ahora guiados por especialistas güeros que les impondrán partituras comprometedoras que garanticen mejores chantajes de políticos mexicanos del pasado y del presente y permitan un más avanzado conocimiento de la manera como el traspatio en ebullición organiza sus asuntillos de poder y dinero.

La ingeniosa maniobra felipense produjo de inmediato atención periodística de medios como El País* y el semanario alemán Der Spiegel, publicaciones ambas que centraron su atención en las rudas decisiones del poderoso mexicano que ha hecho temblar a los narcotraficantes de su patria ¡enviándolos al país vecino para que allá, según eso, dejen de manejar sus negocios, como lo hacían en México, desde cárceles convertidas en oficinas de lujo muy bien vigiladas ­para que los delincuentes de afuera no pudieran hacer algo malo a los de adentro­¡ (*el asterisco arriba inserto fue puesto para llamar la atención del lector respecto a las maniobras periodístico-empresariales de El País, un boletín hispano de transacciones trasatlánticas, también llamado Hacer la (Nueva) América (Ha-La-mer), miembro, ese almanaque de abarroteros políticos, de un consorcio con Prisa por levantar plata, que ha nombrado como comisionado familiar para negocios en México al cómodo cuñado Juan Ignacio Zavala Rediez (re diez por ciento) ¡Hildebrando vive, el bisnes sigue!)

El golpe calderónico a una franja de los empresarios exportadores de yerbitas, polvitos y pastillas ha sido elevado de inmediato a la categoría de "gran golpe", "decisión histórica" y "virtual Quinazo" por la nómina de periodiqueros de formato escrito y electrónico que diariamente hacen esfuerzos siderales por organizarle reconocimientos al señor de Los Pinos por las panificaciones sin levadura que fabrica pero que los medios agradecidos (por favores recibidos o por recibir) magnifican desde su reino de microscopio. La extradición de al-gu-nos personajes de al-gu-nas bandas del narcotráfico es un reconocimiento expreso de la incapacidad del Estado mexicano para enfrentar o controlar ese poder fáctico desbordado y significa la peligrosa cesión de derechos y facultades ­abdicación­ de México hacia Estados Unidos. (Disculpará la clientela que este boticario insista en su receta ajada, pero "en el principio fue el fraude electoral" y de allí se desprende lo demás: un gobierno sin legitimidad busca a cualquier costo el aplauso y cobijo del voraz imperio vecino; sólo con la "comprensión" del grandote de al lado podrá mantenerse el chiquito de casa, sobre todo si se anota que las tareas incumplidas se le acumulan al escolapio al que ni en los expendios de tortillas quieren hacerle caso. Léanse al revés las felicitaciones y apapachos de Gringolandia: nada bueno se estará haciendo por México si ello produce el gran gusto de los representantes políticos del poder depredador de la Casa Blanca y el Pentágono: dime quién te aplaude y te diré a quién sirves.)

Rechiflas en lugar de aplausos, e incluso prisas ­pero no por el negociazo que significará la impresión de las publicaciones del bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolufia, Prisa ésta con acento hispano­ son las que ha sufrido el consejero presidente del Instituto del Fraude Electoral (IFE, palabra proveniente del dialecto gordillo bajo, que combinada con uno de sus subproductos permitió la creación del gentilicio FELIFE). Resulta que Luis Carlos Ugalde se ha organizado una especie de gira nacional del agradecimiento para dar a conocer al pueblo mexicano el llamado Libro Blanco ­cuyas pastas tienen predominancia, en realidad, de un delicado color rosa­ en el que según eso se demostraría que los comicios del 2 de julio pasado fueron una chulada de limpieza y democracia. En Veracruz, y en Guadalajara, el licenciado Ugalde ha sido confrontado por ciudadanos que le reprochan con fuerza el papel jugado en los comicios pasados. De cualquier forma, los datos expuestos en los libros rosados han servido de inmejorable parque discursivo para los canarios de jaula ­¡oh, en realidad son lindos gatitos!­ que presurosos acomodaron sus columnas y comentarios para hacer ver que no ganó las elecciones quién más gastó en propaganda, sino ¡oh, conmovido!, quien menos difusión propia y facturada a su propia cuenta tuvo (y es que ni los libros rosita ni los émulos de Piolín toman en cuenta la descomunal campaña presidencial a favor de Calderón como jinete intercambiable del mismo caballo parejero ni el gasto empresarial ni las campañas de odio... ¡Nada, lo que cuenta es lo oficialmente facturado y las lindas consideraciones de los libros rosaditos!)

Aprovecha el viaje sentimental este tecleador para agradecer a los miembros del Movimiento Ciudadano Lagunero profesor José Santos Valdés la oportunidad de confirmar, durante la reunión regional a la que invitaron a este Jijo de La Laguna, que la resistencia al fraude electoral de 2006 subsiste, fuerte e intocada, pero combinada con un deseo de lucha que busca construcciones democráticas que tracen nuevas líneas para nuevas realidades y que confronten o cuando menos no se dejen avasallar por burocracias partidistas u oportunismos de ocasión. Es tiempo de debate, de autocrítica y de replanteamientos. Sólo así se podrá enfrentar y resistir a una derecha decidida a entrampar la protesta social en los ámbitos de la represión y lo penal, a una derecha que ya ha dado el primer paso formal (con las extradiciones hoy, con las "reformas estratégicas" mañana) para asumirse como protectorado del poder estadunidense.

Y, mientras Norberto pica piedra contra los reporteros, acusándolos de desvirtuar las declaraciones en que dijo que ni maiz que por tortillas se iba a hacer una guerra social, y que la historia no se iba a acabar nomás por chilaquiles caros, ¡hasta mañana, en esta columna escandalizada al estilo Miami porque Hugo Chávez pretende instaurar en Venezuela un impuesto "a la propiedad suntuosa", "a la gran ganancia"!

Fax: 56 05 20 99 * juliohdz@jornada.com.mx