De nuestro correo:
México D. F. a 12 de diciembre de 2006
A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
AL PUEBLO DE MÉXICO
LA determinación de Felipe Calderón de disminuir el presupuesto a la cultura y la educación no nos sorprende a los trabajadores y a la sociedad nacional que ya veíamos venir no solo la continuidad de una política miope y pragmática sino la profundización de acciones que están orientadas a mantener los beneficios de unos cuantos en detrimento de la mayoría de la población; acciones que por su perfil neoliberal atentan contra los intereses sociales y nacionales de un pueblo que hoy es castigado por no darle su voto el pasado 2 de julio.
La reducción del presupuesto a la cultura supondría el desmantelamiento de instituciones históricas como el INAH, y con ello la imposibilidad de investigar, proteger, conservar y difundir los valores históricos que conlleva el patrimonio cultural de la Nación. Por ello, pugnaremos porque el INAH mantenga la regulación de las intervenciones en el ámbito del patrimonio cultural, mediante la defensa de los preceptos nacionales establecidos en la Constitución y en la Ley Federal sobre Monumentos, con el fin de mantener vigente la utilidad pública, la laicidad, el interés social, nacional y el carácter federal, así como la condición inalienable e imprescriptible de los bienes arqueológicos del país, para el pueblo de México.
En los últimos años el presupuesto para las instituciones de cultura se ha disminuido a partir de lo que anualmente aprueba el legislativo del país. En el INAH se aplican, junto a esta disminución, acciones de adelgazamiento laboral en forma permanente; con el programa de retiro voluntario se han eliminado en los últimos tres años alrededor de 800 trabajadores de base, ahora jubilados o pensionados, cuyas plazas se cancelan dejando funciones institucionales sustantivas algarete por falta de personal. En cambio, se trata de imponer una figura de gestor del patrimonio cultural (Art. 33 de la iniciativa de ley Bermúdez), cuya función sería comercializar y promover los servicios culturales y espacios a cargo de la institución, dejando a un lado la dignidad, la soberanía, los valores históricos y el marco legal vigente de nuestro país.
Dicho desmantelamiento institucional se ha sido profundizado en las últimas tres administraciones mediante la imposición de directivos que han facilitado la línea neoliberal en detrimento de la aplicación de la ley vigente.
Por lo anterior, lo que la sociedad tiene que enfrentar no se reduce sólo a la lucha por un aumento presupuestal para las instituciones de cultura, sino a la lucha por su fortalecimiento, mediante la renovación desde los más profundos intereses del pueblo.
Felipe Calderón y Josefina Vázquez Mota no entienden el significado de la importancia de la educación, la cultura, la ciencia y la tecnología, por ello en las instancias legislativas es donde tendremos que hacer sentir el poder de la fuerza social organizada.
Atentamente
Sufragio Efectivo No Imposición
Sindicalistas del INAH
Consejo Laboral Sindical
Movimiento Nacional Organziado ¡Aquí Estamos!
Responsables de la publicación:
Arq. Luis Adolfo Gálvez González y Mtra. Claudia Leyva Corro
Sindicalistas del INAH