domingo, agosto 08, 2010

El Despertar

Me parecen muy respetables las creencias religiosas de todos y cada uno de quienes conformamos el Movimiento Obradorista, pero NO ESTOY DE ACUERDO en mencionarlas como parte de nuestra ideología política.

Nada que ver.

El Presidente jamás ha hablado de religión en sus discursos.

Y por supuesto estoy de acuerdo con el profesor Pinchetti en que lo primordial y fundamental de aquí al 2012, es la organización.

El Despertar
Organizarse, organizarse, organizarse…
José Agustín Ortiz Pinchetti
La iniciativa de AMLO expresada en su mensaje del pasado 25 de julio está penetrando en ondas de toda la sociedad. La conmueve porque está harta del cinismo y de la corrupción. Cuando nos preguntamos hacia dónde va nuestro movimiento, lo asociamos con otra pregunta angustiosa: ¿hacia dónde va este pobre país sumido en la decadencia?
González Pedrero da una respuesta: “un gran estadista… el general Lázaro Cárdenas contestaba, cómo poder sacar a México adelante diciendo simplemente que era necesario organizarse”. Nuestro movimiento y nuestro país, para salir adelante, tienen que organizarse.
Como Federico Arreola señala, AMLO tiene el inmenso mérito de haber organizado en cuatro años a millones en una estructura nueva de participación política. Con energía sobrehumana López Obrador recorrió todos los municipios de México. Nadie lo había hecho antes y nadie había logrado integrar a más de una decena de miles de grupos políticos en todos los rincones del país. Ningún partido político tiene hoy en época no electoral esa riqueza.
El esfuerzo partió de la autocrítica. AMLO ganó las elecciones, pero no pudo tomar posesión no sólo por las campañas de desprestigio coordinadas por Vicente Fox, el más insigne traidor a la democracia, sino por la alianza perversa del PRI y del PAN y la parcialidad del IFE. Tenemos que reconocer con amargura que carecimos de capacidad de respuesta ante el fraude, porque no teníamos organización. Ahora que la tenemos debemos demostrar de lo que somos capaces.
AMLO propone volver a los principios que como estrellas nos guían en la oscuridad de la noche. Volver a creer en la posibilidad de justicia, libertad, dignidad, solidaridad, igualdad. Los grandes ideales políticos de todos los tiempos, todos ellos arraigados firmemente en el cristianismo. [???!!!!!]
Ahí está el atractivo del movimiento: nos propone y nos exige la hazaña de transformar al país sin renunciar a los principios. Vuelvo a González Pedrero para decir: para impedir que México se nos vaya de las manos tenemos que organizarnos. Organizarnos para ganar el poder, cambiar el rumbo de México y para entregar una nación mejor a nuestros hijos.
jaorpin@hotmail.com