jueves, enero 18, 2007

La cascada de incrementos provocó airadas protestas en varias entidades

Manifestaciones a gritos y con cacerolas reflejaron la inconformidad ciudadana

''Felipillo, no golpees nuestro bolsillo'', ''Calderón, qué decepción'', consignas repetidas

C. Figueroa , M. Sánchez , S. Chávez , M. Chávez y A. Morales

Al grito de "no queremos pan, queremos tortillas", y "Felipe Calderón, qué decepción", habitantes de Nuevo Laredo, Tamaulipas, realizaron ayer una manifestación contra el aumento a tortilla, leche, huevo y otros productos básicos.

Al término de la protesta, a la que se unieron integrantes de la iniciativa privada, los niños que los acompañaban rompieron una piñata en forma de pan en la Plaza Hidalgo, mientras otros manifestantes, entre ellos un personaje llamado Supertortilla, regalaron 500 kilos del alimento a los transeúntes, usuarios del transporte público y automovilistas. Anunciaron que cada semana repartirán el producto en colonias pobres de la ciudad.

Encabezada por Francisco Chavira Martínez, dirigente estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), la protesta se inició al mediodía: "Queremos tortilla, no queremos PAN", "Felipillo, no golpees nuestro bolsillo", decían mientras que sus pancartas traían leyendas que decían: "Tienes el valor o te vale. ¿Te vas a quedar callado ante tanto aumento?", "el pueblo come tortilla, no queremos PAN", "el huevo ahora cuesta un huevo".

Asimismo, vecinos de Naucalpan, estado de México, y del Distrito Federal, efectuaron otra singular manifestación: sobre los puentes peatonales que cruzan Periférico norte y la vía Gustavo Baz, exigieron al presidente Felipe Calderón que haga algo para detener la escalada de precios de los productos de primera necesidad, que han impactado negativamente los ingresos de los hogares.

Haciendo sonar cacerolas con cucharas y gritando consignas de rechazo al alza de los alimentos básicos, militantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y de las redes ciudadanas de Andrés Manuel López Obrador pugnaron por un control de precios, mientras pedían a los automovilistas que hicieran sonar las bocinas de sus vehículos.

En el puente de las Torres de Satélite, la dirigente vecinal Margarita Fragoso pidió a Calderón cumpla sus promesas de bajar los precios de gasolina y gas, y repudió el alza en productos básicos.

En Tultitlán, Manuel Gutiérrez, quien dirigió un contingente de vecinos apostados en la lateral de la vía José López Portillo, exigió precios acordes al salario de los trabajadores: "Damos cacelorazo contra el alza de precios".

El senador panista mexiquense Ulises Ramírez Núñez dijo a su vez que haría un análisis de la versión en el sentido de que Vicente Fox conocía de la crisis del maíz y no avisó a tiempo, además de analizar las demandas de control de precios.

Ramírez Núñez sostuvo un encuentro a puerta cerrada con Juana Cortés, presidenta nacional de la Unión de Tortilleros y Molineros; Daniel Hernández Aquino, presidente de los productores de masa y tortilla de la República, y Rafael y Melquiades Lira, dirigentes de tortilleros de Ixtapaluca y Chalco.

Los líderes empresariales de la masa y la tortilla refirieron que los "grandes beneficiarios" del sexenio de Vicente Fox fueron las empresas Minsa, Maseca y Tortimex, entre otras, que recibieron subsidios federales de 15 por ciento en sus productos, y acusaron a estos consorcios de ser los grandes acaparadores del maíz.

En Ciudad Victoria, Tamaulipas, el diputado federal priísta Tomás Gloria Requena sostuvo que el Grupo Maseca (Gruma) es el gran beneficiario del aumento al precio de la tortilla y los más afectados son los agricultores y las clases necesitadas del país.

Dijo que este miércoles se reunieron senadores y diputados para analizar la posibilidad de investigar a Gruma, porque a juicio de varios legisladores de su partido hay sospechas de que el gobierno federal pretende favorecer a éste con el incremento de precios.

Abordado en Ciudad Victoria, durante una reunión de la Confederación Nacional Campesina (CNC), el legislador tamaulipeco acusó al gobierno federal de favorecer a los grandes consorcios nacionales de la masa.

Bajo el lema de "salir a las calles a defender la economía popular", el PRI convocó a una marcha a realizarse el próximo domingo en el puerto de Veracruz, contra el alza generalizada en el precio de los productos básicos y la política económica del gobierno federal. Gilberto Zamorano, dirigente municipal del tricolor, dijo que el repudio es por las medidas "erróneas" tomadas por el presidente Felipe Calderón, que pegarán aún más a las clases populares, y la negativa para subsidiar los productos básicos, principalmente la tortilla.

En Querétaro, las confederaciones de Trabajadores de México (CTM) y Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), así como la Federación de Trabajadores del Estado de Querétaro, se unieron para prorrogar las revisiones salariales y contractuales de sus respectivos sindicatos hasta el 7 de febrero, en espera de que el gobierno federal frene la "carrera inflacionaria" en los productos de primera necesidad o, de lo contrario, aproximadamente 100 mil trabajadores realizarán manifestaciones.

Jesús Llamas Contreras, secretario general de la CTM, que afilia a 80 mil obreros, calificó de "locos" y de "vivir en otro mundo" a los integrantes de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos por autorizar un 3.2 por ciento de aumento, cuando un trabajador requiere de 18 por ciento de incremento a su ingreso para adquirir artículos de primera necesidad.